Si estás pensando en cambiar tus hábitos pero no te decides, hoy te cuento unos trucos que te ayudarán a motivarte para dar el paso.
– Lo primero es querer. Querer por ti y no por otro.
– Infórmate sobre aquella persona que va a tratarte. Es tu salud la que está en juego.
– Márcate unos objetivos.
– Aunque tu creas que estás bien y que te encuentras bien, puedes estar mucho mejor. Digestiones más ligeras, tránsito intestinal regulado, más enérgico, más animado y contento…
– Todo son beneficios para la salud. Llevar una alimentación saludable es el tratamiento preventivo de múltiples enfermedades crónicas no transmisibles, como la diabetes.
– Para mantener esa motivación una vez dado el paso, debes buscar a alguien que te acompañe en el camino, que sea tu guía. En los seguimientos debes poder explicar todo lo que sientes y deben proporcionarte todas las herramientas y estrategias necesarias para ir superando los obstáculos.